Sobre Covid-19, capacidad jurídica y poder duradero
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Sobre Covid-19, capacidad jurídica y poder duradero

January 15, 2021
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El período reciente y la propagación del virus Covid-19, trae consigo para muchas personas - no necesariamente de edad avanzada - muchas preguntas sobre la necesidad de resolver sus asuntos si se encuentran hospitalizados en estado grave y no pueden ocuparse de sus propios asuntos. La situación actual obliga a replantearse la necesidad de elaborar un documento de poder duradero, que regule la gestión de los asuntos de una persona que ha perdido, temporal o definitivamente, su capacidad para ocuparse de sus asuntos, una herramienta que muchos desconocen.

La posibilidad de hacer un poder notarial duradero se reguló en Israel en 2016 como parte de la enmienda 18 a la Ley de Capacidad Jurídica y Tutela de 1962. A diferencia de un procedimiento legal relativamente complejo y "violento" contra la persona, de nombramiento de un tutor legal, el procedimiento de poder duradero es relativamente sencillo. En él, una persona establece de antemano cómo desea que se desarrollen las cosas en tal caso, un procedimiento que respeta la voluntad de la persona, evita la intervención de funcionarios del Estado cuyo tiempo es limitado y permite a la persona seguir controlando su vida.

El poder duradero sólo entra en vigor cuando la persona pierde su capacidad jurídica, es decir, cuando el poderdante es incapaz de gestionar sus asuntos y tomar decisiones por sí mismo en las materias definidas en el documento de poder duradero. Si una persona es capaz de ocuparse de sus asuntos como se ha dicho, entonces el poder aún no ha entrado en vigor (y en ese momento el apoderado aún puede hacer cambios en el documento). Lo mismo ocurre en el caso de un apoderado que volviera a ser capaz de ocuparse de sus asuntos y tomar decisiones por sí mismo -por ejemplo, si fue anestesiado y reanimado pero recuperó la consciencia-, una situación que durante el periodo Covid-19 les ocurre a bastantes personas.
Una de las ventajas de un poder duradero, a diferencia de otros procedimientos, es que surte efecto inmediatamente y sin necesidad de acción judicial, e incluso después de que el poder entre en vigor, la persona apoderada respeta la voluntad del poderdante, en la medida en que éste pueda expresar su voluntad, ya sea por adelantado, en el documento de poder, o en ese momento, por ejemplo, cuando el poderdante es capaz de comprender determinados asuntos y tomar decisiones en relación con ellos, pero no sobre otros asuntos, o cuando el poderdante recuperó la consciencia. La herramienta del poder duradero permite la creación de instrucciones preliminares por parte del poderdante en relación con la forma de aplicar el poder duradero, y también permite establecer la identidad de una persona concreta a la que el poderdante debe rendir cuentas y crear así rupturas y equilibrios.

Para elaborar un poder duradero basta con que el poderdante sea legalmente competente y, mientras la persona tenga capacidad jurídica, sólo ella podrá revocar o modificar el poder. Así, por ejemplo, en un caso visto en el Tribunal de Familia de Tel Aviv en diciembre de 2020, el hijo de una mujer que redactó un poder notarial duradero alegó que el poder que designaba a su hermano debía ser revocado. El Tribunal desestimó la demanda y sostuvo que la única prueba es la capacidad jurídica de la madre y, dado que sigue siendo legalmente competente, es la única con derecho a revocar o modificar el poder.

A la luz de lo anterior, es muy recomendable, especialmente durante este período, considerar la creación de un poder notarial duradero con un abogado de un bufete con experiencia, no sólo en el ámbito de los poderes notariales duraderos, sino también en otras áreas relacionadas con el caso concreto, ya sea derecho societario, inmobiliario o contratos. El mismo abogado cualificado garantizará un claro cumplimiento de las disposiciones de la ley, se asegurará de que el poderdante tiene la capacidad legal y también podrá proporcionar al poderdante una explicación detallada y exhaustiva a fin de garantizar la consideración de su máxima voluntad después de que el poder surta efecto y construir el documento correcto para esa persona y no utilizar una plantilla estándar.