Por lo tanto, parece que el derecho a recibir honorarios de corretaje por la venta de la propiedad se transfirió legalmente del franquiciado anterior al demandante 2, y lo anterior abandona el terreno contra el reclamo de falta de rivalidad con el demandante 2. Si los demandados querían contradecir el contenido del acuerdo de cesión de derechos presentado por los demandantes, y menoscabar su validez, deberían haber actuado para citar a la franquiciada anterior, la Sra. Dikla Turgeman, a testificar ante el tribunal, pero no lo hicieron, y en este asunto no tienen más remedio que quejarse de sí mismos.
- Tampoco hay lugar para aceptar el argumento de falta de rivalidad dirigido al demandante 1. Los demandados y el demandante 1 firmaron los dos acuerdos de corretaje, que también se ejecutaron en tiempo real. El hecho de que la cláusula 6 del acuerdo de exclusividad estipule que los honorarios de corretaje Se recogerá por el propietario de la franquicia contra una factura de impuestos como cuestión de derecho, no niega el derecho legal del agente inmobiliario a recibir la tarifa de corretaje por la venta de la propiedad, después de la Enjugar por el franquiciado, de acuerdo con la división interna entre el agente inmobiliario y el franquiciado. Cabe señalar que en el testimonio del acusado 2 en el tribunal (p. 17 de la transcripción, líneas 22-29), este último reconoció el derecho del acusado 1 a recibir honorarios de corretaje, como una lishna (énfasis agregado –v. P.):
"P. Estos compradores a los que vendiste la casa vinieron a través de Marina, ¿verdad?
- Estos compradores llegaron a través de un remix.
- Marina fue quien les mostró la casa, ¿verdad?
- Así es.
P: ¿Fue ella la que mantuvo varias reuniones con ellos en casa?
- También son clientes de Remax. Ella era la que celebraba reuniones con ellos en casa.
P: ¿Fue Marina la que celebró reuniones en nombre de Amidar en casa?
- Así es".
Más tarde, en la página 18 de la transcripción, líneas 28-32, el acusado 2 testificó lo siguiente: